Me encanta tener sexo lésbico caliente en el jardín con mi mejor amiga y amante.
2En AllxpornoEstaba jugando con mi mejor amiga en el columpio de su patio trasero cuando ella se subió el vestido, se quitó las bragas rojas de algodón y me mostró lo mojado que estaba su coño. «¿Entonces nunca antes has comido coño?» preguntó ella. «Nooo», respondí, sentí que mi propio coño se mojaba. Me di cuenta de que quería besar y lamer su coño. Todo el tiempo que la conocí estuvo obsesionada con las chicas desnudas. Podría pasar horas viendo porno lésbico o hablando de chicas. Mientras ella se equilibra en el columpio, extendí sus tiernos labios rosados con mis dedos y comencé a lamer su dulce raja con mi lengua. Mmm, los jugos de su coño tienen un sabor delicioso, como el néctar más dulce que jamás haya probado. Me senté en su regazo y ella me desabrochó el sostén, llevándose mis pezones hinchados a su boca, chupándolos, lamiéndolos y besándolos de una manera tan tierna que envió escalofríos por mi columna y me mojó muchísimo el coño. Deslicé sus bragas por sus piernas y admiré su perfecto trasero de burbuja y su piel suave, como porcelana. Mientras se aferraba con fuerza al columpio y abría las piernas de par en par, me la comí, concentrándome en su clítoris, metiendo mi lengua profundamente dentro de su coño chorreante y bebiendo sus jugos a medida que fluían de su raja. El hecho de que ambas estuviéramos totalmente desnudas y tuviéramos sexo lésbico caliente en el patio trasero era tan excitante, ¡imagínate lo que podría pasar si alguno de nuestros vecinos mira por las ventanas y ve el espectáculo erótico que estábamos montando! Ella hizo que tomara su lugar en el columpio y me inclinara y pude sentir su suave lengua retorciéndose en mi coño, haciéndome retorcerme de placer. No me malinterpretes, amo a los chicos, pero hay algo en la forma en que otra chica puede tocarte, ¡ningún chico puede igualar eso! Me senté en su cara para que pudiera follarme el coño con su lengua, quería que me hiciera correrme una y otra vez. Podía sentir sus dedos hundiéndose dentro de mi coño, follándome fuerte con ellos, haciéndome temblar hasta el punto de que tuve que agarrarme con fuerza al columpio, ¡temiendo que tanto sexo lésbico caliente me hiciera perder el equilibrio y tropezarme! Después de comerme, presiono mi cuerpo contra el de ella, frotando nuestros coños, haciendo tijeras en el columpio como chicas en el porno lésbico hasta que ambas alcanzamos un increíble orgasmo simultáneo.