El pequeño zorro adolescente necesita ayuda agradable en el dormitorio

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El pequeño zorro adolescente necesita ayuda agradable en el dormitorio

El pequeño zorro adolescente necesita ayuda agradable en el dormitorio

La dulce Myra se ha sentido inquieta hoy. Su libido había alcanzado un máximo de la serie. Él ha estado jugando su apretado coño todo el día, inclinándose y revolviendo su torso debajo de las sábanas moradas. Pero su hermanastro finalmente se dio cuenta de sus luchas. Fascinado, se acercó a ella con curiosidad. La habitación olía a la lujuria gruesa y a Kool-Aid goteando. Myra lo llama para acercarse y pedirle que inspeccione su tubo de amor. Él pone su mano debajo de las sábanas y desliza su dedo en su bonita cueva. La mano extranjera le permite vislumbrar el placer que anhelaba. Ella le agradece con sus adorables labios envueltos bellamente alrededor de su lanza. Su hermanastra cachonda acaricia su carne con sus delicadas manos, calentándola. Una vez que él está listo, ella coloca sus piernas sobre su entrepierna e inserta el cilindro venoso en su coño crudo. Su hermanastro observa sus pequeñas y angelicales tetas y su rostro radiante. Sus cejas fruncen el ceño de alegría mientras el vapor reprimido del día se disipa. Su rodilla se eleva y lo lleva como un ramboide de pasión. Pero Myra no puede arrodillarse por mucho tiempo y finalmente se siente por completo. Montado suavemente hacia el cerdo, empujando sus caderas hacia atrás y hacia atrás como una máquina de salchichas. El ángel es tan delicado como la seda, prolongando la dulzura de su unión el mayor tiempo posible. Finalmente, la niña delgada y desnuda la da la espalda, exponiendo su pequeña puerta anal. Su hermanastro toma sus hermosas nalgas en venganza, perdidas en su suavidad. Pero su deseo evoluciona más allá y la pone de rodillas. Su torso bosqueja vigorosamente, hundiendo su herramienta de inseminación en el fértil cuello del útero. No puede parar, pero Myra no quiere que me detenga. Su mente está en blanco mientras se rinde a su pasión más básica y corre dentro de ella. Mientras observa cómo se escapa la crema, espera ayudarla nuevamente.