Rubia con su pequeño coño duro

Sé que no amas nada más que un coño joven y apretado. Todavía es temprano en la mañana y este pequeño adolescente está sentado en el sofá blanco, con su pijama del cielo azul. Puedes ver todo claramente cuando abres las piernas. Ella es delgada, con cintura delgada, tetitas y un buen culo. Sí, quieres que lo uses como una muñeca sexual. Levantas a la chica desnuda y la colocas en el sofá. Sin un segundo para perder, deslice su enorme y dura polla en su coño pequeño y apretado. Ella grita con placer, alentándote solo a la gente más rápido. Mirando hacia abajo, ves tu polla deslizándose dentro y fuera de su pequeño cuerpo, dentro de su agujero resbaladizo. Los labios hinchados de su coño ahora se ven gordos debido a su pene gordo. Envuelve las manos alrededor de los muslos y, con un movimiento rápido, los separas tanto como puedas. La niña termina desde el lado, con una pierna unida al hombro y la otra pegada a su pierna. Tu polla la golpea, sin perder el ritmo, y todo lo que puede hacer es tomarla como una buena chica, gemir y rogarte que la dejes correr. Su clítoris está hinchado, pero quieres vengarte de ella por molestarte tan temprano en la mañana. Duele que tocen y jueguen con él, pero ignoraste su frijoles y sigues golpeando aún más fuerte dentro de ella. La punta de tu polla golpea todos sus puntos profundos, muy dentro de ella. Con su coño temblando alrededor de tu polla, te monta. Su clítoris está aplastado contra usted debido a la posición en la que está. La niña agarra tus brazos musculosos para mantener el equilibrio y finalmente derrama tu semen dentro de ella, haciendo que corra contigo.